“Y si el Barça pincha contra el Atleti y el Valencia…”

"Si ganamos todos los partidos sumamos 90 puntos y ganamos la Liga. Tenemos mucha ilusión en ganar la Copa y la Liga de Campeones". Así está el percal en el Foro. Estas palabras de Florentino Pérez en Real Madrid Televisión las suscriben un porcentaje altísimo de madridistas. ¡Cómo han cambiado las tornas en este 2006! Y es lógico. Después de unos meses de zozobra, de sufrir en cada partido, esta racha triunfal de siete victorias y un empate en el nuevo año ha devuelto la ilusión a un madridismo necesitado de alegrías. Y su equipo se las puede dar porque tiene opciones de ganar los tres títulos, aunque si consiguiera la Liga sería porque la perdería el Barça.

"El Barça ya no puede hacer triplete, nosotros sí". Repiten los madridistas, crecidos, desde la eliminación copera barcelonista. Y eso es una realidad. Claro que lo de la Liga se antoja utópico, mucho más si el Barcelona mantiene su impresionante y espectacular nivel de juego. Lo de ganar todos los partidos y sumar 90 puntos suena a deseo imposible. "Pero ponte en que el Barça pincha mañana con el Atlético y luego contra el Valencia y el Madrid no falla, se pone a 7 puntos, y tiene que ir al Nou Camp", esta es una reflexión escuchada ayer en una tertulia de seguidores blancos. Como decía Valdano, el fútbol es un estado de ánimo, como todo en la vida. Y no hay ningún motivo para que el ánimo de los barcelonistas se venga abajo por su eliminación copera, pero hasta Madrid llega un cierto desasosiego desde Barcelona.

La polémica por el arbitraje de Rodríguez Santiago se me antoja curiosa. El árbitro que casi provoca un hecho histórico e incomprensible que estuvo a punto de suceder: la impugnación de un partido por parte del Real Madrid por su pitido fantasma en Montjuïc, el mismo colegiado, se ha convertido en unos meses, para algunos, en un esbirro del madridismo por su más que rigurosa expulsión a Ronaldinho. No creo que haya que ver fantasmas, salvo la aptitud de Rodríguez Santiago. Aquí se cumple el tópico ese de que "unas veces te dan y otras te quitan". Lo que ocurre es que en medio de la persecución del Real Madrid al Barcelona en la Liga, de repente, al Barcelona le empiezan a quitar algo y al Madrid no. De momento, la distancia sigue fijada en 13 puntos. Y el Barcelona puede igualar mañana el récord de victorias en Liga del Real Madrid de Di Stéfano. El nerviosismo que se percibe aquí en Madrid desde el ‘puente aéreo’, por tanto, no parece en absoluto justificado.